La presidenta de la ANEP, Virginia Cáceres, celebró el cálido recibimiento del Presupuesto Participativo por parte de los estudiantes, y afirmó que no es posible construir un centro educativo si no es con la participación activa de los jóvenes. “Contar con su voz en cada una de las decisiones que se toman es fundamental”, valoró. “Los procesos de participación no se dan naturalmente, tiene que haber una voluntad explícita y acciones concretas para generar esa participación y me parece que esto que está pasando entusiasma a otros”, celebró.
Por su parte, el coordinador general de Paemfe, Andrés Riva, indicó que todos los centros educativos una vez construidos pueden ser mejorados en su desempeño y calidad a partir de una mayor autonomía de los estudiantes para que puedan tomar decisiones. “Promover esa autonomía en la toma de decisiones, que se empoderen y puedan proponer, contribuye a la construcción de una sociedad más democrática”.
Gabriela Bentancor, jefa de Acompañamiento en Territorio de Ceibal, destacó la participación de los estudiantes, la experiencia piloto junto al Liceo de Isidoro Noblía, así como la calidad de las propuestas de los jóvenes.
Claudia Brovetto, gerenta de la Red Comunidad de Innovación Pedagógica de Ceibal, expresó: “Este proyecto es bastante original y único, ya que destina parte del presupuesto de una obra a algo que sea decidido por los estudiantes. Tiene que ver con una manera de pensar y de escuchar la voz de los estudiantes en diferentes ámbitos”.
¿Qué es y por qué lo hacemos?
El Presupuesto Participativo es un mecanismo democrático e inclusivo de toma de decisiones colectivas. Diseñado por ANEP y Ceibal, su objetivo es fomentar la participación activa en la asignación de recursos presupuestales, democratizando la toma de decisiones en los Centros Educativos públicos.
Este programa, desarrollado en el marco del Plan de Convivencia y Participación en Centros Educativos, y particularmente en la guía de implementación "Tu voz, tu acción, tu centro", busca institucionalizar la participación activa de los estudiantes en la educación pública. La participación democrática e inclusiva en un centro educativo implica un cambio de enfoque respecto a los roles, funciones, atribuciones y responsabilidades de cada uno de sus integrantes.
La participación en la toma de decisiones colectivas es esencial para el funcionamiento de un sistema democrático y republicano. Las instituciones educativas juegan un rol crucial en la construcción de la ciudadanía, ya que promueven la democracia como un fin en sí mismo y fomentan la participación como un pilar fundamental en toda construcción colectiva. La participación no es solo un mecanismo formal, sino un componente sustancial de la vida institucional. Desde esta perspectiva, la democracia no se limita a un sistema de agregación de voluntades individuales, sino que se construye a través del involucramiento de las personas en un proyecto colectivo.
El propósito de este programa, en un contexto de construcción de ciudadanía democrática, es diseñar instituciones que promuevan la igualdad política, la libertad, el autogobierno, la deliberación y la virtud cívica. La vida colectiva en una sociedad democrática es, en sí misma, una experiencia educativa.
El programa apuesta por la construcción de modelos participativos y deliberativos de convivencia democrática en los centros educativos, impulsando un modelo de gobernanza basado en la inclusión de todos sus integrantes.
En resumen, la implementación de un Programa de Presupuesto Participativo consiste en el diseño de un mecanismo de toma de decisiones en las instituciones educativas que, basado en un enfoque deliberativo y participativo, descentraliza la ejecución presupuestal de la ANEP, otorgando a las instituciones un mayor grado de autonomía. Esto les permite, a su vez, fortalecer sus identidades democráticas, tomando en cuenta las necesidades de su contexto y, especialmente, la voz de los estudiantes.
¿Dónde y con qué fondos?
El Programa de Presupuesto Participativo se implementará inicialmente en los centros educativos con edificios nuevos, como parte final del proceso de obra edilicia.
Se asignará un presupuesto equivalente al 1% del total de la obra ejecutada, que estará a disposición de la comunidad educativa para decidir, mediante un procedimiento participativo, su destino.
El Liceo Rural de Isidoro Noblía, Centro María Espínola, ha sido seleccionado para la primera experiencia piloto del programa en 2024.
¿Qué destino tendrán esos fondos?
Los fondos asignados a cada Centro Educativo estarán destinados a proyectos que mejoren su funcionamiento a través de la mejora de las instalaciones físicas y la adquisición de equipamiento para actividades educativas, recreativas y de ocio. El bienestar y confort de los estudiantes es el eje central de esta propuesta.
Para capitalizar mejor las inversiones en los edificios educativos, se considera fundamental profundizar el diálogo entre arquitectura y pedagogía, alineando buenas ideas con el uso adecuado de los espacios. La participación de los estudiantes en la infraestructura educativa impacta favorablemente en la apropiación de estos espacios, reforzando la responsabilidad en su cuidado, lo que contribuye a un ambiente que favorece la enseñanza y el aprendizaje.
¿Cómo funciona?
Una vez aprobada la financiación por parte de ANEP, ANEP y Ceibal desplegarán un mecanismo para acompañar al centro en el desarrollo de la propuesta y en la implementación del mecanismo de participación.
Dado que el objetivo es diseñar un mecanismo participativo, inclusivo y democrático de toma de decisiones, el proceso debe asegurar el involucramiento efectivo de los participantes.
El procedimiento se desarrollará en varias etapas sucesivas antes de concretar la asignación de los fondos:
1. Acuerdo de agendas: Se establecerán agendas de trabajo con la dirección, los docentes y los estudiantes del centro educativo.
2. Talleres de sensibilización: Una vez acordada la agenda, se llevarán a cabo talleres de sensibilización (para docentes y estudiantes) sobre el mecanismo de participación y el uso de los espacios de aprendizaje, con el objetivo de preparar propuestas.
3. Conformación de equipos de trabajo: Se crearán los equipos de trabajo y se presentarán en detalle las bases, condiciones e hitos del proyecto. Esta etapa incluirá investigación y desarrollo de ideas, análisis de viabilidad, presupuestos y normas de uso, entre otros aspectos. Los equipos contarán con materiales de orientación para el desarrollo de sus propuestas.
4. Desarrollo de propuestas: Los estudiantes, con el acompañamiento técnico de arquitectos y especialistas en adquisiciones de la ANEP, trabajarán en el desarrollo de las propuestas. Esto garantizará la viabilidad de las ideas y permitirá la retroalimentación necesaria.
5. Ajuste de propuestas: Las propuestas pasarán a una etapa de ajuste, basada en los criterios establecidos en la Guía de Presentación de Propuestas y el intercambio con los asesores proporcionados por ANEP y Ceibal.
6. Selección democrática: La etapa final consistirá en la selección democrática de las propuestas mediante voto universal y secreto. Antes de la votación, se organizará un evento en el que cada equipo presentará sus propuestas ante la comunidad educativa. El proceso de toma de decisiones debe ser deliberativo e informado.
Las propuestas serán financiadas en orden de prioridad, de acuerdo con los votos recibidos, financiándose tantas como lo permita el presupuesto disponible.